En todas partes del mundo hay combinaciones que no son exactamente obvias, pero que funcionan sorprendentemente bien. Yucatán tiene las suyas: el queso de bola con Nutella y las galletas Globitos con Coca-Cola, por ejemplo. Sin embargo, ninguno viene de un recuerdo colectivo como lo hace el tamal embarrado de merengue.
A diferencia de las demás, esta combinación tiene una explicación perfectamente razonable. Por décadas (¿siglos?) los yucatecos disfrutamos la celebración de todos nuestros primeros cumpleaños (y los de nuestros hermanos, primos, amigos y uno que otro desconocido) con lo que se conoce como un plato de fiesta.
Qué lleva el plato de fiesta yucateco
El menú del plato de fiesta podía variar según el gusto (y presupuesto) de los anfitriones, pero sus elementos siguen siendo prácticamente invariables hasta hoy. Para los niños, una combinación de espagueti rojo, dos arrolladitos de paté de queso, en algunos casos ensalada de pollo y un vaporcito (o tamal torteado). Para los adultos, espagueti, sandwichón, ensalada de pollo, conitos (rellenos de picadillo con mayonesa), un vaporcito o un tamal colado. En cualquiera de los dos casos, una rebanada de pastel. Todo en el mismo plato, una cosa encima de otra, creando una accidental combinación de sabores que a miles de yucatecos nos tocó saborear generación por generación.
Cómo surge el plato de fiesta
¿Por qué estos platillos? ¿Por qué todos juntos? La respuesta correcta suele ser la más sencilla: en todos los casos, se trata de alimentos que son “fáciles” y económicos, no sólo de preparar para mucha gente, sino de repartir en el trajín de una celebración. Recordemos que, hasta hace algunos años, la comida de las fiestas se preparaba en casa, y era repartida por los anfitriones y su familia más cercana. Cada familia tenía un especialista en un área: la tía que siempre hacía el espagueti, la tía que siempre hacía el sandwichón. Actualmente, en las fiestas infantiles es más frecuente encontrar pizzas, hot dogs, y hasta carritos de marquesitas o hamburguesas; si a eso añadimos que se trata de platillos que normalmente se hacían en equipo, resulta que es cada vez más difícil tener acceso a estos manjares combinados como debe ser.
Dónde comprar un plato de fiesta
Quizá sea por eso que ya hay varios negocios en Mérida que se dedican a recrear el plato de fiesta yucateco. No importa si necesitas 30 o sólo uno. ¿No te gusta la ensalada de pollo? ¿Quieres dedicarte exclusivamente a los arrolladitos? Aquí no tienes que ir con mucha pena a preguntarle a la mamá de alguien si te puede preparar un plato especial; tú puedes armar el tuyo con los elementos que más te gusten, incluyendo rebanadas de pastel para embarrar tu tamal.
Si eres yucateco de antaño, quítate el antojo. Si no, quítate la curiosidad, y aprovecha para probar el enigmático sandwichón de una vez por todas. ¡ Anímate a descubrir por qué lo amamos!
Una búsqueda rápida en Facebook te llevará a encontrar múltiples opciones, pero aquí te dejo un par que te pueden servir:
Franny Delicias
Sucursales: Lindavista y Alemán
Don Sandwichon
Calle 24 #201-A x 26-Diag y 23, Fracc. Brisas
FB: Don Sandwichon
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