Nueva York en los sesentas fue el primero en escuchar el término “salsa” como género musical. Sus melodías con ritmos afro cubanos (inspirados en el mambo, la guaracha, etcétera) viajaron desde Cuba, encontrando su camino por Puerto Rico y Colombia para posteriormente, hacer su marca en el Bronx.
Hoy en día, en la península de Yucatán, el calor no nos disuade de salir a bailar hasta que los tacos de cochinita estén completamente fuera de nuestro sistema. Creo firmemente que no hay que ser un experto (o tener un gramo de ritmo) para pasarla bien, y aunque claro, ver a la gente pasar y sentarse a platicar un rato es agradable, poner los pies en acción (y quizás dar un par de vueltas) nos brinda una forma diferente de moverse por Yucatán.
El término salsa carga consigo una connotación picante y latina. Invita a participar en el crescendo y la tensión que la caracteriza, creando colaboración y fortaleciendo la relación entre los bailarines. Para comprobar esta hipótesis, el Centro de Mérida es el lugar ideal.
Mercado 60, un conjunto de restaurantes y bares al aire libre combinados con un escenario que ofrece música en vivo, es un excelente espacio para probar tus pasos de baile sin miedo a ser juzgado. El establecimiento tiene noches de salsa los fines de semana y clases gratuitas para principiantes dos veces al mes (revisa los horarios en su página de Facebook: Mercado 60). El maestro de danza Gabriel me explicó cómo el baile “logra que [la gente] se atreva, que pierdan ese temor y se arriesguen a intentar algo nuevo”.
Después de calentar motores en Mercado 60, el público suele transportarse hacia La Bianca Mérida, un restaurante italiano con pista, una parada obligatoria, según los aficionados al baile de la ciudad. Ahí, la fiesta comienza a las 11:30 pm. La música está a cargo de un DJ que además de salsa, suele tocar bachata, merengue y reguetón.
Otros lugares para "seguirla" incluyen Trópico 56, Pipiripau, Delirio Habanero y La Carmela. La Mezcalería también da clases para principiantes los miércoles a las 9 pm.
Si te sientes nostálgico y quieres recordar canciones de antaño, el Parque de Santiago se llena de vida cada martes de “Remembranzas musicales” a las 8:30 pm. Desde hace más de 30 años, parejas de todas las edades disfrutan de sus composiciones favoritas bajo la luz de la luna. Aquí, más que salsa, los ritmos preferidos son el danzón y el chachachá, pero son también una excelente forma de dejarte llevar por la música. Toma en cuenta que al salir a bailar en Yucatán te puede hacer bastante calor, así que vístete cómodo y fresco.
El baile es una actividad social. Al convivir con otras personas, las fronteras se disuelven, creando empatía. El calor, la música, el swing - todo es parte de la fiesta. Si ser experto no es un requisito, tener una buena actitud ¡sí que lo es!
Fotografía de Mercado 60
Artículos relacionados
