Parecido a sus contrapartes humanas, después de un verano de volar, coquetear, aparearse y ver a sus polluelos crecer en los Estados Unidos y Canadá, más de 4,000 millones de pájaros de 350 especies distintas, se preparan para dirigirse al sur y pasar unas vacaciones de invierno. Alrededor de 200 de estas pasan la temporada en Yucatán.
Uno de los más extraordinarios es el pequeñísimo colibrí gorgirrubí de 3.5 gr. Con uno de los metabolismos más rápidos del mundo animal, estas aves vuelan por más de 20 horas y atraviesan 950 km por el Golfo de México. Son de particular importancia ya que tienen la habilidad única de polinizar plantas que otros polinizadores no alcanzan.
Las aves migratorias enfrentan condiciones muy peligrosas y casi un cuarto de ellas mueren en su travesía. Los seres humanos somos un peligro agregado por medio de la destrucción de hábitat, cacería y contaminación que puede desorientar a los pájaros resultando en colisiones mortales de noche.
Esta migración es enormemente importante para la economía local y rápidamente se ha convertido en uno de los atractivos ecoturísticos más grandes de Yucatán. Ya que la región es el hogar de más de la mitad de las especies de aves encontradas en México, Yucatán se ha vuelto un gran destino para los pajareros y pajarear es una actividad perfecta para el distanciamiento social.
Aunque los famosos flamencos están en la lista de la mayoría de los visitantes, hay muchas oportunidades únicas para pajarear. Muchos entusiastas vienen a Yucatán con la esperanza de avistar especies endémicas como la chara yucateca y el carismático pavo de monte. Pero también se pueden ver especies de tanto el este como el oeste de los Estados Unidos y Canadá, todos de visita al mismo tiempo, y esto hace una pajareada por Yucatán muy especial.
Uno de los mejores lugares para el avistamiento de aves es la Biósfera de Celestún con sus 60,000 hectáreas que sirven tanto como un sitio de invernada para algunas aves, como la primera parada en la ruta sur para otras especies migratorias. Es un paraíso para tanto los pájaros como los pajareros, aquí puedes encontrar especies amenazadas como el frailecillo silbador, el frailecillo blanco y el zorzal durante el invierno.
Pajarear en tu jardín también es fácil en Yucatán y si quieres participar en actividades internacionales desde casa, es muy fácil con la aplicación Ebird; que es gratuita y le permite a todos ser parte de una de las investigaciones sobre biodiversidad más grandes del mundo. También puedes ayudar a proteger las aves migratorias en Yucatán al apoyar al Proyecto Santa María, nuestro único centro de rescate y rehabilitación para múltiples especies de aves.
Editorial por Colette Kase and Jamal Andrewin Bohn
Fotografía por Isias Morataya, Bill Drennon y Cherrie Pitillo
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Vivo en el este de Canada (Ottawa) y soy aficionado a ver pàjaros. Los que visitan mi jardín son colibrìs, orioles, varias especies de pàjaros carpinteros y otros muchos màs y me pregunto si algunos pasan el invierno en en esa parte de Mèxico.
Hola Oscar,
Todos los pájaros que mencionas los tenemos aquí también… ¿locales o migratorios? esa es la pregunta