¿Tienes ganas de enseñarles a tus hijos un poco del mundo? Si te dijera que he hecho justo eso recientemente, ¿te escandalizarías y me recordarías que hay una pandemia y que es mala idea hacer vuelos internacionales? Quizá tengas razón.

 

¿Y qué si te dijera que puedes ver el mundo sin salir de Mérida? Sí, de verdad. Puedo llevarte a tres continentes sin ni siquiera cruzar el Periférico. Bueno, tal vez no sea del todo cierto, pero suspendamos la incredulidad por un momento y veamos qué pasa.

 

Primera Parada: Asia

Dirígete al aeropuerto, pero deja tu pasaporte en casa porque nuestro destino, el Parque Japonés, queda cerca del aeropuerto (a diferencia de Japón, claro).

 

El Parque Japonés es un parque bastante típico en muchos aspectos: tiene un parque infantil bien cuidado, una cancha de basket y mucho espacio para correr. También cuenta con puertas Torii (ya sabes, las que normalmente se ven a la entrada de un santuario sintoísta japonés que marcan la transición de lo mundano a lo sagrado) y hay bambú que crece alrededor del parque. Sin embargo, no hay pandas. También hay un lindo jardín japonés con pequeños puentes sobre arroyos y una bonita cascada. Lamentablemente, desde las inundaciones del 2020, esta zona está bajo agua, pero tenemos la esperanza de que algún día los puentes y las islas vuelvan a emerger y los niños puedan volver a explorar esta zona.

 

Dato curioso: las puertas Torii son rojas porque el rojo es el color de la vitalidad en Japón. También se dice que el rojo protege del mal. Hay más de 32,000 puertas Torii en Japón.

 

A mis hijos les encanta este lugar por su parque de patinaje y a los más pequeños les encantarán los senderos – hechos para parecer carreteras – por las que pueden correr.

 

Compra sushi para comer en el parque. Miyabi Express (Montealbán) ofrece opciones de comida para llevar, o bien, puedes comprar bocadillos en Asian Mart para que los niños conozcan la comida japonesa. Mis hijos adoran los paquetes de snacks de algas. Sí, así es, me piden algas de merienda. Lo sé, me odias.

 

 

Dónde: Calle #116-B, Jardines de Nueva Mulsay III

 

Segunda Parada: Europa

Ya me estoy pasando, lo sé. El Parque de la Alemán no se llama así por Alemania, sino de Miguel Alemán, el mismo expresidente mexicano que da nombre a la Colonia. Este parque tiene un aire encantador y es popular tanto entre los niños pequeños, a los que les encanta el espacio y, en épocas normales, la feria y las actividades nocturnas; como entre los mayores y los adolescentes, a quienes les encanta el parque de skate que hay aquí.

 

Dato curioso: los juegos mecánicos de Atracciones Cáceres – la feria permanente del parque – tienen más de 50 años. Son una pieza importante de la historia de Mérida. PD, mi marido también tiene más de 50 años. Así que también forma parte de la historia. Eso sí que es divertido.

 

¿Por qué no ir a buscar algo de comida alemana en La Bierhaus (Colonia México) o en la tienda alemana Meyer’s (Colonia Itzimná) para que sea realmente una experiencia alemana?

 

Dónde: Calle 21, Col. Miguel Alemán

 

Tercera Parada: Sudamérica (También Incluye Centroamérica y Norteamérica)

Sí, el Parque Las Américas. Cuatro manzanas de parques en la encantadora colonia García Ginerés, cada manzana con su propia atracción. El parque se construyó en la década de los 40 y sigue siendo uno de los lugares más populares en Mérida para salidas familiares.

 

Seguramente los niños querrán que los lleves directamente al parque infantil con juegos, pero aguanta y llévalos a echar un vistazo a las otras tres manzanas. Una de ellas tiene una enorme fuente (en la que, hace muchos años, mi hija de entonces dos años se escapó, se sentó en el centro y se rió de sus padres que intentaban sacarla); otra cuadra, una concha acústica elaboradamente decorada: y la última, habitan una biblioteca y una zona de descanso.

 

 

Sin embargo, en este artículo nos centraremos en las columnas que hay por todo el parque. Cada columna está decorada y dedicada a un país diferente de América. A mis hijos les encanta averiguar qué columna «pertenece» a cada país. Hemos encontrado columnas de países sudamericanos y centroamericanos (¡y México, claro!) y afuera de la biblioteca también hallamos los escudos de Estados Unidos y Canadá.

 

Dato curioso: el parque se diseñó como un homenaje a la unidad entre los países de América. Nos vendrían bien más mensajes de paz y cooperación en el mundo.

 

Si estás allí al anochecer, encontrarás puestos de comida callejera para que, mientras visitas Las Américas, puedas probar algunos antojitos yucatecos, como una marquesita o un esquite.

 

Dónde: Calles 22 – 18, Col. García Ginerés

 

¿Qué te parece? ¿Caerán tus hijos en la trampa o se sentirán amargamente decepcionados porque (no me culpes, por favor) les dijiste que iban a viajar y luego sólo los llevaste al parque?

 

 

Editorial por Cassie Pearse
Escritora y bloguera
Especialista en aventura en familia

 

Fotografía por Cassie Pearse para uso en Yucatán Today.

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