Caribe

En el corazón del Centro de Mérida se encuentra una gema hotelera con una historia fascinante.  Ubicado en una hermosa casa del siglo XVII en el rincón de una de las plazas más bonitas de la ciudad, el Parque Hidalgo, este hotel abrió en noviembre de 1955 con 32 habitaciones distribuidas en dos plantas. Actualmente cuenta con 53 habitaciones distribuidas en 3 plantas, una piscina en la planta alta y una vista espectacular.

El edificio fue originalmente el seminario de la Diócesis de Yucatán, después se convirtió en la escuela católica de San Ildefonso. Posteriormente fue un observatorio astronómico y meteorológico, y finalmente, Don Enrique Torre Ayora lo convirtió en el Hotel Caribe hace 60 años. Poco sabría en aquel entonces de que cinco años después, su vida terminaría debido a un ataque cardíaco fulminante, y que su hijo de 18 años, Jorge Torre Loría, sería arrojado hacia el manejo y la gerencia del hotel, quien lo operó desde entonces.

En septiembre del 2014 fue vendido, y los actuales dueños están muy orgullosos de esta larga historia. Ellos invertirán sustancialmente en él, proveyendo todas las amenidades de los hoteles modernos, pero preservando al mismo tiempo su sabor tradicional. Algunos de los empleados han estado ahí desde el día en que el hotel abrió hace 60 años, y Don Jorge siempre estará en la mente de los que ahí colaboran.

Los huéspedes disfrutan del cálido y atento servicio que le proveé el devoto personal, quienes son como familia para los dueños del hotel. Para consentirse un poco, sea huésped o no, visite el restaurant-bar “El Rincón” y escuche a su famoso trío de trova “Los Tres Yucatecos” todos los días, excepto los domingos, de 12 a 1 pm mientras disfruta de la deliciosa cocina yucateca. Se sentirá como si hubiese retrocedido en el tiempo a la época en la que el Hotel Caribe era uno de los primeros hoteles en la ciudad de Mérida.

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