Ya tienes tus boletos, el itinerario de viaje y quizá unos cuantos tours agendados; pero falta lo más importante: llenar tu carry on —o backpack, según tu estilo de viaje— con todo lo necesario para la travesía. Si eres como yo, querrás pecar de precavido y considerarás cargar la mitad de tu casa. No lo hagas por amor a tu espalda, déjame te cuento los esenciales de viaje para Yucatán.
Para los efectos del sol
Sé que siempre lo repito, sin embargo, es necesario recalcar que el calor yucateco —y el sol— se mantiene todo el año. Nuestras temperaturas superan los 30°C en un buen día, incluso llegan a los 40°C en primavera y verano. Apunta bien. Necesitarás protector solar (ecológico de preferencia), ya sea en barra o líquido; entre más elevado el SPF, mejor. Además, echa una gorra y un abanico de mano, que te ayudará a refrescarte. En caso de que no tengas lo último, encontrarás vendedores en casi cualquier lugar.
Ropa, ropa, ropa
Sí, tus cinco calzones extra son bienvenidos. Sin embargo, puedes googlear “lavanderías” y encontrarás una infinidad a buen precio. ¿Nos visitas en temporada de lluvia y frío? No puede faltar un impermeable con tela repelente al agua y al viento, los que parecen chamarra se han vuelto muy populares. Así te ahorras un suéter y un poncho, pero si no tienes… mete un suéter y un poncho.
Como observación, la temporada de lluvias es de junio a octubre, aunque con los “frentes fríos” también llegan chubascos en invierno. Además, aun cuando las temperaturas durante el día sean muy elevadas (por encima de los 35°C), las noches son frías… y húmedas. Cuando vengas, por favor, no olvides algo con qué taparte.
¿No visitarás ningún cenote ni la playa? De todas formas mete un traje de baño, ¡nunca sabes cuándo te encontrarás un cuerpo de agua! Lejos de los cenotes o la costa, en Tekax, encontré una deliciosa piscina en pleno verano. Créeme que vas a querer tirarte para mitigar el calor.
Misceláneos
Hay cosas muy “random” que a veces se nos olvida agregar, por ejemplo, el repelente ecológico. Cada lluvia que caiga, cada día que los moscos se harán presentes… y cualquiera puede ser mosco de dengue. No es por ser alarmista, a mí nunca me ha dado dengue, pero más vale prevenir que detener el viaje a medias (¡o al inicio!).
Habrá cosas que quieras llevar contigo a todas partes, en mi caso: el bloqueador, los clip-on y el repelente. ¿Dónde llevarlo? Carga con una bolsa (o mochila) un poco más pequeña, ¡un accesorio para decorar tu outfit! Procura que sea de colores neutros si te importa que combine con todo.
¿Te has preguntado si debes traer efectivo o basta con tus tarjetas? La recomendación general es que vengas con una buena cantidad de efectivo en pequeñas denominaciones. Seguramente vas a toparte con pequeños comerciantes o artesanos que solo aceptan efectivo y, en ocasiones, el cajero más cercano está a un pueblo —o más— de distancia. Por ejemplo, en una visita a Maní tuvimos que ir hasta Oxkutzcab para encontrar el cajero más cercano, y ni siquiera había del banco que buscábamos. ¿Se arregló? Claro, ¡pero vaya susto que nos llevamos!
Okay, ahora sí lo último: tus medicinas. En caso de que requieras alguna medicación, recuerda traerla contigo. Si llegas a tener algún tipo de malestar, como dolor de cabeza o indigestión, igualmente puedes comprar fácilmente algún medicamento en las farmacias. Estas suelen tener consultas gratuitas para evitar que te automediques. Tampoco te confíes, así que incluye unas cuantas en tu maleta.
Editorial por Olivia Camarena Cervera
Comunicóloga yucateca. Tu Assistant Editor favorita. Escritora, blogger y bookstagrammer en su tiempo libre; experimenta con TikTok.
Fotografías por Nora Garrett para su uso en Yucatán Today.
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