Un alimento para el alma; eso dicen que es el arte. Por otro lado, U Janal Pixano’ob, el término correcto en maya para denominar lo que entendemos por Janal Pixan, significa “comida de las ánimas”. En Yucatán, la coincidencia no parece ser caprichosa. La rememoración de los difuntos es el núcleo de distintas obras de arte teatrales, literarias, pictóricas y musicales. ¿Las conoces?

 

Janal Pixan en el teatro

“Pero no se pongan tristes. Acuérdense que la gente muere cuando el olvido nos entierra”. Esta voz es de Conchi León, escritora, actriz y directora en “Historias del Janal Pixan”. El actor Raúl Niño había muerto apenas, llevándose consigo a Salma Salomé, su personaje icónico para el teatro yucateco de comedia regionalista. La obra es una experiencia íntima, un vistazo al profundo cariño que la artista conserva por su colega y amigo. Pronto nos encontramos ante un homenaje y un retrato dramático. Un altar de tres niveles, guarecido de la penumbra por la luz del fuego y el verde crucifijo, hace pensar en el deseo del reencuentro rumbo a la bajada del telón.

 

 

La Secretaría de la Cultura y las Artes del Estado de Yucatán comparte en YouTube la obra completa: https://yuc.today/ConchiLeonJP

 

Janal Pixan en la literatura

Son igualmente evocativas las palabras de Pedro Uc Be: “Sobre las hojas de plátano, tu madre coloca tu jícara: / Es el atole nuevo donde reposan tus esquinas celestes, / En la casa de Xibalbaj yace la yuca endulzada, / Y en el iswaj duerme la carne de los dioses, / Arrodillada la sangre de tu sangre rezan en horno de piedra, / Eres memoria que levanta con su paso nuestras ánimas”. Este fragmento de Pixaan, escrito en maya por Uc Be (traducido al español y al francés por Nicole Genaille), presenta el altar, la bebida y el alimento a través de los cuerpos que descansan y los que acompañan este recuento de la memoria. https://yuc.today/pedrouc

 

Janal Pixan - Fernando Castro PachecoJanal Pixan en la Pintura

Al óleo se pintó uno de los altares que mejor invitan al espíritu. El título es más que una promesa: Hanal Pixán, de Fernando Castro Pacheco, llena el ritual luminoso de calidez y pureza. La obra es una gran vela que titila y deshebra su humo. Se parece bastante a la sensación de una nostalgia bien contada. Del lado izquierdo, un haz de oscuridad asoma, ensombreciendo el cuerpo de la mujer frente a los alimentos. Pero Castro Pacheco realza la oportunidad del fuego y cempasúchil; crea una sensación de paz y recogimiento. Parece que del incienso emana la comida, y de pronto no sabemos si la mujer espera visitas de sus difuntos o es ella quien ha retornado por el amor del recuerdo.

 

María Moctezuma - Janal Pixan músicaJanal Pixan en la Música

La guitarra de María Moctezuma encara la muerte en la canción dedicada al ritual. Se pierde el miedo al placer, a la fiesta y a lo que hay de comer. “Ay, que la muerte me lleve aquí, en Yucatán, para el Janal Pixan. Y, así, entre los vivos, vendré a caminar y a agarrar el jaibol del altar”. El estilo musical de Moctezuma es sorpresivo, muy propio y paralelo a la música tradicional. ¿Un rock acústico y jovial para traer de vuelta la vida? Ni más ni menos. www.yuc.today/JPMM

 

Seguramente existen más obras de arte de las que mencionamos aquí. Las que te presentamos aquí están disponibles de forma gratuita en YouTube, en el sitio web www.yuc.today/pedrouc y en la sala permanente de Fernando Castro Pacheco en el Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY).

 

 

Por David S. Mayoral Bonilla
Dave Mayoral (1998) cree que es complicado escribir en tercera persona sin reírse en el intento, pero su formación en Lengua y Literatura Modernas, Historia del Arte Contemporáneo y Gestión Cultural suele ayudarle bastante…

 

 

 

Fotografías por David S. Mayoral Bonilla para su uso en Yucatán Today.

 

 

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